Españoles, Franco... Ha vuelto.

Que en paz descanse el Art. 20
 
El pasado 1 de julio entró en vigor en España una de las leyes más criticadas de la legislatura pepera, la conocida popularmente como Ley Mordaza, o, valga la ironía, Ley de Seguridad Ciudadana, la cual vulnera hasta 12 puntos de la Constitución. Su objetivo principal es limitar la protesta social a través de uno de los instrumentos favoritos de la política: el miedo. Dicha ley también ha llegado a oídos de la ONU, la cual a insistido, junto a otros países europeos tales como Alemania y Reino Unido, al gobierno de Rajoy que retire la propuesta, ya que "atenta contra derechos fundamentales del ciudadano". Por no decir que prestigiosos medios de comunicación internacionales hayan advertido de su carácter franquista. Pese a esto, como de costumbre, han visto para otro lado y han seguido con lo suyo. Pero vayamos por partes.

¿Qué es lo que trae esta ley que genera tanta polémica?

Pues bien, haciendo un resumen rápido, pretende ser un paso más hacia 1956. "Si Franco levantase la cabeza..." pues estaría orgulloso.  Pero eh, vamos a dejarnos de cinismos, que esto sin argumentos no tiene gracia. Lo divertido de todo esto, es la forma de evidenciar el deseo de este gobierno de que cada ciudadano se quede en su casita sin molestar. Pero, ¿como lo harán? Con tres herramientas que forman un triángulo a tu alrededor: represión económica, criminalización de la protesta social e impunidad policial. El triángulo del miedo.

-Impunidad policial y libertad de información:

Los perritos del Estado tendrán total libertad para actuar contra manifestantes, sean estes pacíficos o no, y de disolver cualquier reunión pública entre ciudadanos sospechosa de "alterar el orden público", sea esta pacífica o no. A pesar de que la Constitución española ampara que todos tenemos derecho a manifestarnos espontáneamente. Pero a partir de ahora, cualquier convocatoria que no sea previamente comunicada a las fuerzas del Estado, será considerada ilegal. En resumen, que tengas cuidado si vas a quedar con tus amigos o amigas y levantas mucho la voz. Además, dichos perritos están totalmente protegidos, de tal forma que, si tú te manifiestas y a uno de ellos le da por arrearte una hostia, su palabra vale más que la tuya y la de todos los que lo hayan visto. Y a ver como intentas demostrar tu victimismo ante un juez, porque a partir de ahora estará penado con multas de hasta 30.000 euros grabar o fotografiar a la policía, así como su difusión. Para más inri, si se te ocurre promocionar por redes sociales tales como Twitter una convocatoria de protesta, aunque esta sea informativa, podrás ser acusado de terrorismo, aunque esto solo sea un agravante. Y por si todo esto fuese poco (no nos vayamos a quedar con ganas), ahora será la policía la que pueda juzgar tus infracciones supuestamente perjudiciales para el orden público y no un juez, por lo que podrás ser penado en cualquier momento de cualquier forma si se interpreta que estás tocando mucho los cojones, con respecto, claro, a las pautas recogidas en la Ley Mordaza como infracciones.

Todo esto, además, supone una censura contra la libertad de prensa: cualquier periodista que acceda a páginas web de contenido calificado como "terrorista" (que vaya usted a saber quién lo ha calificado), aunque sea con un fin informativo o periodístico, podrá ser acusado de cometer un delito de terrorismo. Además, los periodistas podrán ser espiados por el Estado si su trabajo es considerado "una amenaza para la seguridad pública". Y en este saco puede entrar hasta Piolín.

Ah, se me olvidaba: muchas formas de protesta hasta ahora consideradas derechos fundamentales, pasarán a ser delito. Es decir, que tu resistencia pacífica a la autoridad supondrá hasta nueve meses de prisión y multas desorbitadas.

-Libertad de expresión y manifestación:

¿Recordais los tweets de Zapata? Dios mío, como para no. Fue el caramelo que estaban esperando todos los franquist... digo integrantes del PP. Pues mucho ojo con el humor negro. Con la nueva y maravillosa ley, "la realización de actos que entrañen descrédito, menosprecio o humillación de las víctimas de los delitos terroristas o de sus familiares, se castigará con la pena de prisión de uno a tres años y multa de doce a dieciocho meses". Esta es la versión oficial. La versión real es que esto es muy amplio y puede entrar de todo, aunque sea un chiste. No es una cuestión de que ese chiste sea de mal gusto, que tú lo interpretes de mal gusto es tu problema, pero no deja de ser humor. Sin embargo, cuando Rafael Hernando (PP) acusó a las víctimas del franquismo de "acordarse de sus abuelos cuando hay subvenciones", ahí no, ahí no se interpretó ningun "menosprecio o humillación de las víctimas de los delitos terroristas". Ah no, claro, Franco no era un terrorista. ¿No?

Y mucho cuidado con esto: "las caricaturas o contenidos satíricos contra Felipe VI y familia ahora podrían considerarse un delito contra la Corona". Tócate los cojones. En otras palabras, que te tiene que gustar la monarquía sí o sí (como si no fuera suficiente que, por nacer en España, tengas el deber de mantener económicamente a esta familia impuesta por un franquismo), y si no te gusta y lo expresas, estarás cometiendo un delito. No, no me recuerda para nada a la dictadura. Que va. Libertad de expresión en su máxima expresión, por supuesto.

Para completar el kit: "cualquier mensaje difundido por internet que caiga en la definición de 'enaltecimiento de los nuevos delitos o la difusión de consignas' que puedan incitar a otros a cometerlos, serán también considerados terrorismo". Vamos, que pobre del que se pase el día en Twitter o Facebook quejándose por todo o expresando sus ideas, las cuales claro vayan en contra de las de este gobierno. Te queremos, Mariano.

Y además:

Fuente: The Huffington Post






















¿Y todo esto qué viene a significar?

Y mucha más mierda que esta ley trae consigo. No voy a hablar sobre todas las partes fascistas que recoge, porque no me daría la tarde. Demasiados apartados, que parecen muy coherentes, pero que son una trampa. Un bonito resumen de todo esto podría ser que, si antes ya te estaban jodiendo, ahora te van a joder más como se te ocurra quejarte de que te están jodiendo. A mucha gente esto le parece insignificante y otra pues directamente pasan de esto y de todo. De hecho, mi opinión es que esta ley se les queda grande y no van a poder con todo, y que va a derivar en una pila de injusticias sociales por parte de un gobierno, por si aun no quedaba claro, franquista. Esto ya no es una cuestión de "eres un radical" o "eres un facha". Esto ya es una cuestión humana. Una cuestión de que yo, como ser humano en convivencia, puedo y tengo derecho a pensar y expresarme de forma independiente. Y nadie, mucho menos un gobierno, puede limitarme a ello. Aunque aquí, estamos los oprimidos y los que se dejan oprimir. Los ciudadanos de este país somos cobayas de laboratorio con las cuales están experimentando para ver cuanto aguantan sin rebelarse. Y lo llevan haciendo muchísimos años. Y con esto, ya están por rematarlo. Si bien este país en ningún momento ha superado el franquismo y mucho menos la transición, ahora pretenden volver a ello. Estamos más que aburridos de ver siempre este jueguecito. La cuestión, es que hasta ahora siempre han ido mordiéndole la oreja al ciudadano, y de repente se han puesto delante. La verdad, es que se me hace muy triste tener que escribir sobre esto, y sentirme impotente al no poder expresarlo con toda la rabia que quisiera. Pero ya estamos acostumbrados a que nos traten de cobayas. A ver cuanto aguantamos.

Bienvenidos a Españistán, donde Venezuela es la pequeña de la familia.